Pregunta: los humanos tenemos alma en nuestro interior del cuerpo?

Héctor Vives Arias contestada el 21 Nov 2021:

Esta es una pregunta comprometida, así que voy a limitarme a exponer un par de cosas que tengo yo personalmente en cuenta para decantarme hacia un lado u otro 🙂

En primer lugar, si entendemos que el alma es un ente incorpóreo en el que se encuentran nuestros pensamientos o nuestras emociones, ¿podría ser algo que existe totalmente fuera del mundo físico? ¿Podría ser completamente indetectable o debería poder medirse de alguna forma? Si el alma es lo que toma las decisiones o siente las emociones, cuando se decide hablar o la tristeza hace que lloremos, o alguna otra emoción cambia el ritmo de nuestros latidos, se están produciendo reacciones físicas de nuestro cuerpo, que está hecho de moléculas. Por tanto, para que el alma sea la causa, tiene que interaccionar con esas moléculas de algún modo. Y medir algo es básicamente tener una interacción física con ello y registrar los efectos. De modo que si el alma es capaz de influir nuestro cuerpo físico, no puede ser imposible detectarla. ¿Por qué no la hemos detectado? Podría decirse que tal vez es muy difícil de detectar, pero entonces significaría que interacciona muy poco con la materia, y en cambio los efectos que vemos están siendo muy grandes. Aquí hay que tener cuidado, no obstante, porque hay gente que dice tener máquinas que detectan el aura de las personas o cosas similares… pero ese tipo de aparatos suelen detectar lo mismo aunque se apunten a objetos inanimados en vez de a personas.

En segundo lugar, sabemos que alteraciones en el cerebro, sea por daño en alguna región, o la acción de drogas o fármacos, pueden llegar a producir cambios en la personalidad y alterar los recuerdos. Si nuestra personalidad o lo que nos hace tener una percepción del «yo» está en el alma, parece que el alma puede cambiarse al provocar cambios en el cerebro en sí. La explicación de esto sin hacer uso del concepto de alma sería que la personalidad, mente y recuerdos son el resultado del funcionamiento del propio cerebro, sin requerir ingredientes extra.

De modo que para que exista un alma con las propiedades que se le suelen atribuir, no puede ser totalmente indetectable, y está tan ligada a la estructura de nuestro cerebro que cambios químicos o físicos pueden cambiarla de forma importante. ¡Da que pensar!